Tengo una amiga de blog que cada
vez que hablo de “decoración” se sube a una silla de la cocina como si hubiera
entrado una rata. Y no quiero molestarla, pero es que la Realidad me puede.
Como me puede el problema lingüístico
que tengo con este Gobierno, que no me entero nunca de si dicen lo que creo que
dicen, o si han cambiado la semántica del español (¡una lengua tan bonita y ellos que dicen ser tan
españoles!).
Después de varios meses, hemos
conseguido que pronuncien la palabra “rescate”. Todos los periódicos
principales del mundo hablando del Spanish bail, y ellos erre que erre con lo
de “esto es un crédito en muy buenas condiciones de mercado”. ¡Qué guay, yo
quiero otro! (No lo necesito, pero si las condiciones son tan buenas, podré
jugar a comprar deuda soberana y forrarme).
Pero no lo usan para referirse a
ese primer rescate (dicen que la distancia es el olvido, que cantaba no sé quién,
y el “tiempo” es, en cierta manera, una distancia), sino al segundo. El
problema es que solo hablan de ello para decir “De momento no vamos a pedir el
(segundo) rescate” o “No vamos a pedir un (segundo) rescate”. La palabra entre
paréntesis no la pronuncian, pero con todo la diferenciación entre “De momento
no” y “No” resulta inquietante.
Si tuvimos que meterlos a todos
en un hotel rural con encanto, con un foniatra y un catedrático de la Carlos III
(que es más de confianza para ellos) para que supieran pronunciar “r” “e” “s” “c”
“a” “t” “e”: res-ca-te, rescate, ¿a quién le quedan fuerzas para enseñarles que
“no” es una partícula negativa, que no vale para denotar lo que SÍ van a hacer?
Me doy por vencido.
Luego están minucias, como la de
“esto no es un a amnistía fiscal” (traducción: “esto es un coladero para los
delincuentes fiscales”). De verdad, me doy por vencido, que se encargue la RAE
si le apetece.
Pero lo de ahora, me ha podido.
Mi instinto me pierde. Quieren “modular” los derechos constitucionales de reunión
y manifestación. ¡Tócate las narices! Con la cantidad de problemas que hay en
el país y quieren cambiar una parte de la Consti que funcionaba de puta madre. Y
no es solo que, como me los conozco, me temo que “modular”, para ellos,
significa “cercenar, espachurrar, impedir, trabar, entorpecer, liar, etc.”.
Reconozco que en Madrid, tantas
manifestaciones molestan. Pero ¿no se les ocurre pensar que los que nos
manifestamos estaríamos mucho más a gusto en casa, leyendo un libro, tomando
algo y escuchando a Camarón? ¿Se creen de verdad que nos gusta meternos entre
miles de personas, últimamente con riesgo para nuestra integridad física,
pasando calor o frío, o muriéndonos de ganas de buscar un bar para tomar una
caña y hacer pis?
¿No sería más lógico que hablen
entre ellos para que no tengamos razones para salir a la calle, con lo incómodo
que es? ¡Ah, la lógica! Si lingüísticamente no tienen perdón de dios, en lógica
es que ni se enteran.
Pero lo peor del asunto es que
tengo rasgos de psicópata, y una de las palabras que más me hostilizan
(gracias, Moli) son “modular” y “módulos”.
Es oír “modular” y acordarme de
los gallos de adolescente, hasta que “modulé” la voz
Es oír “módulos” y pienso en una
cárcel. Las cárceles están administradas por módulos. Si os meten en una, decid
que sois buenos y que no os lleven al módulo de peligrosos. Ahí están los CIEs,
orgullosos de serlo, que hasta se tatúan un punto entre el dedo índice y el
pulgar. Si os meten ahí, tened en cuenta que no debéis mirar mal a nadie. Y si
no os queda más remedio, hacedlo con un
solo ojo: os dejarán tuertos. Pero si lo hacéis con los dos, os ciegan.
Total, ya saben que van a salir de ahí con los pies por delante. Tampoco los
otros módulos son cosa de gusto, pero menos peligrosos sí son.
Otro significado de “módulo” que
me da escalofríos. Es algo que ha pasado en el edificio donde vivo (en dos
pisos, ya). Alguien tiene una casa grande donde puede vivir una familia hasta
de dos hijos y mantener un cuartito para los suegros o un amigo ocasional. Empieza
a modularla, echando tabiques, y la convierte en un piso patera con módulos ínfimos
con taza de wáter y ducha en los que viven 5 o 6 familias (cada familia en su módulo,
con pasillo de uso comunal).
También odio “módulo” por sus
significados matemáticos, que soy incapaz de entender: Longitud del segmento
que define un vector. Divisor común en una congruencia. Razón constante entre
los logaritmos de un mismo número tomados en bases diferentes.
Ya sé que soy un zote, pero me
molesta que me lo restrieguen por la cara.
Otro motivo personal, pero
importante, es que de joven estaba en un grupo musical que actuábamos por las
fiestas y discotecas de pueblo y un día fuimos teloneros de “Los módulos”, ese
grupo infecto de repeinaos y trajeaos que cantaban eso de “Sabes, que ya llegó
la hora, que dentro de un momento te alejarás de míiii”. Daba rabia que
cobraran 10 veces más que nosotros. (y se ligaran a las más guapas).
Hay más cosas, pero os las
ahorro. Pero creo que son suficientes para hacer esta petición al Gobierno:
Querido Gobierno, ya sé que van
a hacer lo que les dé la gana, que para eso tienen la mayoría absolutista.
Pero, ¿qué más les da, ya puestos, elegir otra palabra? Podrían hablar de “abrillantar”:
“Vamos a abrillantar los derechos de reunión y manifestación”. A mí me parece más
solemne; y pensaría en Don Limpio o en el pato ese que limpia las tazas del wáter.
Con lo que me quedaría mucho más tranquilo, además de infinitamente agradecido.
¡Cuánta razón tienes¡ ¿Lo de modular viene de la cirugía estética también? Ahora dirán que es mejor manifestarse en algunos de los poblados, echando primero a la gente, y sin botellón por supuesto, porque pondrán un bar para algún sobrino descarriado primo de la niña de Rajoy
ResponderEliminar¡Que asco¡
Otra abominación decorativa son los llamados "sillones modulares" Unos sofás horrendos y carísimos en los que, cuando te sientas, convencida de que van a aguantar tus posaderas mientras ves el telediario, (es un poner), acabas deslizándote irremisiblemente por una ranura-agujero negro que puede acabar perfectamente en la Plaza de Castilla. (no sé por qué se me habrá ocurrido precisamente ese sitio. ¡Me echas a perder, NáN!)
ResponderEliminarLucho Gatica es el que MODULABA la voz admirablemente para interpretar esa canción.
ResponderEliminarEstos lo que quieren es, como hacen en algunas ciudades con el botellón, asignarles un lugar desértico en la meseta para que se manifiesten como quieran, de todas maneras mandarán a los gorilas para seguir dando hostias a mansalva, que les encanta...
Salud
Buenisimo..me he descojonado...ese momento freudiano de que la Cifuentes te retrotraiga a cuando cantabas en un grupúsculo ( jijiji..esta palabra seguro que también la odias) y otros se llevaban la pasta y las churris...
ResponderEliminar...gracias Nan..que me viene bien reirme a estas horas.
¡Qué asco, sí, JONHAN! La idea del manifestódromo alejado de la ciudad ya la dio en su momento, ese gran intelectual llamado Álvarez del Manzano, exalcalde Madrid, el que derribó en 24 horas La Pagoda, el edificio madrileño del que se han escrito en el mundo más ensayos y artículos de arquitectura. Pero si lo hacen, deberían llevarse también allí las procesiones de Semana Santa, la vuelta ciclista, las carreras y las celebraciones de fútbol. Las calles, para los coches y para caminar (pero rapidito, ¿eh?, que “pasear” estará mal visto).
ResponderEliminar¿También hay “módulos” en la cirugía estética? ¡Madre mía! Yo es que soy más partidario de nacer con la cara que nos da dios y morir con la que nos merecemos.
Un abrazo, veloz amigo.
¿Ves, C.S.? Pensaba yo que mi psicopatía contra esa palabra era minoritaria o personal, ¡pero somos millones! No sabía que esos sillones-tobogán se llamaban modulares. Otro clavo en mi ataúd. Pero no tires balones fuera y me culpes a mí de tu perdición, que sabes perderte tú solita de maravilla. (un consejo: sal del agujero negro en otro sitio, una terracita del retiro, por ejemplo, con la cerveza puesta ya en la mesa).
Un abrazo
¡Eso es, GENÍN, Lucho Gatica! El de “reloj no marques las horas”. En mi casa se escuchaba mucho por la radio y era buenísimo. Exageras en tu predicción, creo que al erial alejado solo los enviarán cuando corresponda un “ejercicio táctico”, no todos los días.
Otro abrazo
Me alegra haberte hecho reír, MOLINOS. Pero oye, que “grupúsculo”, aunque sea despectivo y la sílaba central sea “pus”, no es una palabra que odie. En mi mocedad estuve en muchos “grupúsculos”, tan pequeños que cuando un miembro pillaba la gripe se suspendía la reunión por falta de quorum. Los españoles somos así, “separadizos” por convicción. A principios de siglo, en la masonería liberal europea (nada que ver con la anglosajona y americana) había un Gran Oriente por país (el Gran Oriente de Francia, el de Italia, etc.). Aquí, no. Empezó con uno, pero al cabo de cinco años teníamos el Gran Oriente Español de Pérez, el de Martínez...
Besos
Si es que al hablar no dicen nada, es un lenguaje vacío, vano y hueco. Sin embargo se van a cargar el lenguaje de la constitución porque, como decía Carrillo, España es el patio de su recreo.
ResponderEliminarMódulo me conduce a autónomo, esos que con tanto esfuerzo y con dinero prestado crearon un tejido industrial ahora destruido, y quedándose con deudas por mantener esos puestos de trabajo, ahora sin nada o con una pensión de miseria.
Es cabreo por tantas cosas y una tristeza que duele.
A ver si nos entendemos, rojos. ¿De qué os estáis quejando exactamente? MODULAR la barbarie es algo inteligente. Necesario para el bien común, para la supervivencia de una sociedad que últimamente está asolada por movimientos que, aunque marginales, promueven la desobediencia civil y el odio hacia las instituciones del Estado. Que aparezcan estos grupúsculos subversivos (por no hablar de los peligrosos separatistas catalanas) obliga a las autoridades a tomar medidas coherentes, como la de, efectivamente, regular los derechos de manifestación y reunión. ¿Qué os creéis que es España, rojos? En esas poco higiénicas protestas que formáis ante el Parlamento se ha detectado la presencia de inmigrantes, de republicanos, ¡incluso de mujeres! ¿Acaso las muj...? Oh, me comunican que, de un tiempo a esta parte, las mujeres ya pueden votar. Lo siento mucho, me he equivocado y no volverá a ocurrir.
ResponderEliminarSi en vez de emplear vuestra rabia en destilar odio hacia la gente de bien empleaseis ese ímpetu en buscar trabajo y remar, como aconsejó Su Majestad, otro gallo cantaría a este país que se llama España.
Aprovecho para recordar que Cristina Cifuentes es mi amiga de Twitter. Que el 24 de Julio le felicité su santo y me respondió con mucha amabilidad. Envidiosos.
Pues sí, mira, ISABEL, ese significado "módulo" carga también las tintas negras de la palabreja. El tratamiento de los autónomos es una injusticia cuya responsabilidad podemos cargar sobre todos los que nos han gobernado.
ResponderEliminarBesos
De eso se encarga un becario, LARISA, que te emocionas por cualquier cosa.
¿Hacia qué país decía Su Majete que debíamos remar para encontrar trabajo?
Con respecto al primer párrafo, solo decir que eres un lujo impagable para esta casa o bitácora, el contrapunto de luz inexcusable que equilibra mi más que preturbada visión del mundo y la de mis comentaristas, todos ellos amigos que me he hecho en la cola de siquiatra.
A ver si nos damos unos besos de sabor a mezcal... o bueno, los besos son la parte menos necesaria del plan.
Las palabras, qué cosa complicada son, no son nada que se pueda agarrar, pero las joías dirigen los caminos del pensamiento, llevan una carga de profundidad muy poderosa.
ResponderEliminarQue quereis rodear el congreso, pues eso es asaltar, carajo, que no os expresais con claridad.
Que quieren modular las manifestaciones, pues eso es poner orden, que seguís sin saber.
A ver si os enterais. Que ellos son blandos, suaves, dulces y respetuosos; y sois vosotros los que vais por ahí causando sobresaltos y asaltando.
Besiabraz...esto, qué tocabas en un grupo?, hombre eso se cuenta con más detalle.
Había un twitter del Lordo que decía: "Mi gobierno me modula lo normal".
ResponderEliminarYo es que he hecho de tó, IRE. Un espíritu inquieto con la buena fortuna de haber vivido la infancia y la adolescencia antes de que se inventara la psicología infantil y juvenil. Me libré así de que me etiquetaran y me empastillaran.
ResponderEliminarLas Palabras del Poder, sí: bonitas, curiosas y solo para iniciados.
Besiabraz
El chiste pertenece a otra época, MAESTRO MICROALGO. Hos habría escrito "Mi Gobierno me modula a palos que me deja molido".
Salud y abrazo
¿Hacia dónde remar? Hacia donde diga el cómite, que para eso es el que lleva el látigo. ¿desde cuando los galeotes deciden el rumbo?
ResponderEliminarJa, ja, a mí también lo de "modular" me suena a recinto carcelario, ya sea tangible y físico, ya se trate de otro simbólico pero no menos dañino para las libertades. De todos modos, me pregunto ¿de qué nos extrañamos?
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte, querido amigo.
Jopelines y cáspita, C.S., con lo tranquilo que me había dejado Larisa con lo de que Su Campechanía nos aconsejaba remar. Por Su experiencia me imaginaba que organizaría unas Regatas de Huída bien organizadas. Me has quitado la ilusión: los mares que nos circundan van a ser un despelote, con traineras, barquitas del Retiro y canoas hinchables surcando desordenadamente los mares en rumbos cruzados. Los que vienen en pateras van a flipar.
ResponderEliminarSi nos cruzamos, que sepas que soy el del pañuelo rojo en la cabeza.
Abrazos acuáticos.
Ya, ISABEL, ya. Si por desgracia lo teníamos todo previsto. Pero esto es como la gripe de todos los inviernos. Aunque sabemos que nos va a pillar, cuando llega jode.
Un abrazo
"Dar cela, pulir cela" decía el honorable Miyagi, maestro de Robert Carusso en Karate Kid. Ralph Maccio ya no es guapo (prueba empírica aquí http://www.imdb.com/name/nm0001494/) y quizás nunca fue sexy, pero Rajoy sí fue una vez una joven feliz y aquél que tiró sus pintalabios por el retrete es quien ahora debería lucir cuello en la guillotina. Quebrar la felicidad de una pobre niña asustada, con un retraso mental agudo, convertirla en un político con barba y frenillo, y colocarla al frente de un país no tiene perdón de ningún dios. Por muy creyente que uno sea.
ResponderEliminarComo ya escribió Spregelburd, "la realidad es una construcción de lenguaje de los poderosos", pero también dijo y digo que hay otras realidades posibles (otros lenguajes) que se pueden hacer efectivas con un poquito de interés por parte de todos. Hace tiempo que ya no basta con indignarse ni esconderse.
No basta, así que BASTA.
Seguimos.
Besos.
Voy tarde, te había leído pero la vida interfiere y no pude aportar mi siguiente acepción a módulo: cuando ya terminé mi etapa académica, la gente hacía "módulos", y es algo q spr me ha irritado pq no sé de qué va, y encima suena muhco menos trabajo q el q hicimos nosotros, los muy kapr... Es como la ESO: nunca me enteré, donde esté BUP o FP (q era para los antihigiénicos q describe LARISA, q por cierto lleva un cacao con el feisbuk y el tuenti, y los módulos, cree q en tuiter se tienen amigos, cuando lo q tenemos son SEGUIDORES). Como leí un día por ahí "Si Jesucristo tuviera tuiter, le seguiría" (yo no, eh? la pongo por ingeniosa)
ResponderEliminarmuxu
di
Siento lo del Ralph ese, SUE. Tampoco la belleza dura eternamente. Te veo así como lanzadilla, ¿no? También yo ando con espíritu de revuelta en el frenopático algunos días (bastantes días, para ser exactos). Procuro calmarme y reírme un poco; pero una guillotina figurada, así como en un teatrillo de títeres, ya me ronda por la cabeza. Se ve que desde que escuché a ese jefe de policía explicando lo malo que es la resistencia pacífica y que, en el buen uso de la autoridad, no habría dudado en detener a Gandhi, cuando estaba el pobre sentadico en el suelo hilando con la rueca, te planteas “¡Joeeeer!, cómo se está poniendo el patio. Como sigas así de bonachón y bobalicón novas a ninguna parte”.
ResponderEliminarCon respecto al segundo párrafo, a ver si nos damos un poco de prisa en aprender a silabear el nuevo idioma, que parecemos la clase de los torpes.
Salud, compañera.
Cierto, DI, ¡Me había olvidado de los “módulos educativos”! Gran cosa esa: todas las palabras nuevas que impida saber dónde estamos, bienvenidas sean al cuerpo jurídico y social. Desde luego, a mí me confundiría que mi hijo viviera con un formulario de los módulos que va a hacer (y también me sonaría a que al final va a estudiar Cerámica sin Horno y Construcción de Nidos).
Larisa es una desbocada (hola Lari, lo digo con cariño) . Y abarca demasiado. La frase no es solo divertida. Si te fijas a la salida de misa un domingo, te das cuentas que de los chorrocientos mil católicos del país, el 99% deben seguir la cosa por tuenti, twitter o Facebook. Ni van ni se les espera.
Besos